El comandante estadounidense de la misión contra el Estado Islámico en Irak y Siria, el teniente general Sean MacFarland, anunció en conferencia de prensa que unos 45.000 milicianos fallecieron, aunque destacó que es complicado determinar el número de combatientes que actualmente tiene el grupo yihadista, pero “lo que está claro es que ahora no oponen la resistencia de antes”.