Los actos antisemitas violentos en el mundo aumentaron cerca de un 40% el año pasado, según un estudio de la Universidad de Tel Aviv, que señala principalmente a países como Francia y Reino Unido.
En 2014 se produjeron 766 actos antisemitas violentos contra personas o instituciones judías, frente a los 554 de 2013, indica el informe anual del centro Kantor para el Estudio del judaísmo europeo contemporáneo, publicado cada año con motivo de la conmemoración en Israel del Holocausto.
En concreto, el número de ataques a mano armada contra personas o instituciones judías aumentó más del doble en 2014, con 68 casos en el mundo, y los ataques contra sinagogas también crecieron hasta un 70%, según este estudio.
Como en los años precedentes, fue en Francia, país de Europa con mayor número de judíos (unos 600.000), donde más incidentes antisemitas violentos se produjeron, 164 en total. Sin embargo, según el estudio, fue Reino Unido el país que registró un mayor incremento: 141 actos violentos en 2014 frente a 95 en 2013.
Este informe subraya asimismo una tendencia mundial a reforzar los planes gubernamentales de lucha contra el antisemitismo, si bien considera que "no tienen ningún efecto sobre los primeros actores del antisemitismo: la extrema derecha y la extrema izquierda, el islamismo radical y otros grupos sin afiliación política".
Por su parte, los israelíes guardaron en la mañana del jueves dos minutos de silencio y duelo mientras el sonido de las sirenas recordaba a los seis millones de judíos asesinados en el Holocausto nazi durante la II Guerra Mundial.
El Día de Recuerdo del Holocausto es uno de los festivos más solemnes del calendario nacional. Con el sonido de las sirenas, autos y autobuses estacionaron en el arcén de autovías y carretas. Los conductores salieron de sus coches y peatones pararon, inclinando la cabeza en recuerdo de los fallecidos.
Este año, las ceremonias que se celebran en todo el mundo se han consagrado al 70 aniversario de la liberación de los campos de concentración y de la "vuelta a la vida" tras la deportación.
En la inauguración de los actos de conmemoración el miércoles por la noche, el primer ministro Benjamin Netanyahu estableció, como ya hizo en años anteriores, un paralelismo entre el Holocausto y la amenaza existencial que supone Irán sobre Israel.