Los negociadores israelíes y palestinos se iban a reunir ayer miércoles para intentar ampliar las conversaciones de paz más allá del plazo del 29 de abril, según informó el Departamento de Estado de Estados Unidos.
Ambas partes accedieron al encuentro pese al malestar por el asesinato de un policía israelí fuera de servicio en Cisjordania en vísperas de la festividad judía de Pascua. La mujer y el hijo del agente resultaron heridos. Sin embargo, esta reunión entre los equipos negociadores israelí y palestino no se celebró y fue aplazada a solicitud de EEUU, principal mediador en el proceso de paz, según fuentes oficiales palestinas. El encuentro estaba previsto en Jerusalén pero tendrá lugar definitivamente hoy jueves, después de que los mediadores estadounidenses así lo solicitaran, precisaron fuentes de la Presidencia de la Autoridad Nacional Palestina (ANP). Al parecer, Washington deseaba analizar en la noche de ayer cuestiones relativas a la parte palestina -que no especificaron-, y que será abordada en la reunión de hoy.
Israelíes y palestinos han mantenido decenas de encuentros en el actual proceso de paz iniciado a finales de julio y cuyo plazo vence el 29 de este mes, jalonado en las últimas semanas por los desencuentros y medidas hostiles para las partes contrarias como el incumplimiento israelí de la liberación de presos palestinos, el cese de la cooperación salvo en materia de seguridad, o la decisión de la ANP de suscribirse a 15 agencias y tratados internacionales.
En la cita de hoy participan como parte del equipo palestino el jefe negociador, Saeb Erekat, el destacado funcionario de la OLP Mohamed Shtaye y el responsable de la inteligencia palestina, Mayid Farraj. Por parte israelí asisten la titular de Justicia, Tzipi Livni, y el enviado del primer ministro israelí Isaac Moljo.
Mientras tanto, se han producido importantes reacciones al atentado del pasado lunes. El primer ministro israelí Benjamin Netanyahu acusó a la Autoridad Palestina de “incitación al odio” tras el ataque mortal contra un policía israelí cerca de la ciudad de Hebrón, en Cisjordania. “Ese asesinato es el resultado de incitación al odio por parte de responsables de la Autoridad Palestina que continúan vehiculando en los medios de comunicación contenidos llenos de odio contra Israel, que se tradujeron en el asesinato de un padre de familia que iba a celebrar la cena del Pesaj (Pascua Judía)”, declaró el primer ministro en un comunicado.
Por su parte, el ministro de Asuntos Religiosos de la ANP, Mahmud al Habash, condenó el ataque. Al Habash censuró el asesinato, y manifestó que “condena todos los asesinatos y siente el dolor de las familias“, de acuerdo al medio electrónico israelí “Ynet”.