Israel es considerado el país más vegano del mundo, ¿por qué uno de cada 10 ciudadanos de Tel Aviv es vegano o vegetariano?
Hace unos días comenzó a viralizarse una publicidad en la que una joven pareja caminaba por un supermercado en busca de carne para una cena festiva. La mujer, tras rechazar un paquete de carne de oveja congelado, dijo que quería oveja “fresca, fresca”. El asistente del carnicero, muy sonriente, aparece entonces con una ovejita blanquita y se la coloca en los brazos de la clienta. “¿La quiere cortada o envuelta?”, pregunta.
El anuncio, de la organización sin ánimo de lucro Vegan Friendy, ha sido vista por cerca del 40% de la población israelí, y un estudio independiente encargado por la ONG indica que unos 150.000 israelíes dijeron que la publicidad les había llevado a dejar de comer carne o reducir su consumo.
El mes de noviembre es el Mes internacional del veganismo, pensado para crear conciencia sobre la salud individual pero también sobre asuntos relativos a la crueldad animal y sostenibilidad medioambiental, tan relacionada con la producción de carne, lácteos, pescados, huevos, cuero, lana y otros productos derivados de seres vivos.
Según las últimas estadísticas, el 5 por ciento de los israelíes son veganos, el 4 por ciento vegetarianos, el 8 por ciento “flexitarianos”, que quiere decir semivegetarianos, y los activistas señalan que este tipo de movimiento sucede aquí antes de que en otros lugares.
¿Por qué Israel es tan vegano?
Por ejemplo, en octubre de 2014, Israel fue anfitrión del mayor festival vegano. Tuvo patrocinadores como Domino’s pizza, que eligió probar en este país su primera pizza no láctea.
El logo de “vegan friendy” (indicando que el lugar es apto para veganos) aparece en por lo menos 1.500 restaurantes israelíes y en 6.500 productos que se venden en Israel, incluyendo el nuevo calzado de Adidas sin cuero, que hizo su debut en este país precisamente.
Israel probablemente sea la meca del veganismo también porque las creencias judías están bastante en sintonía con este estilo de vida.
“Las leyes de comida judías, la “kashrut”, están muy presentes en Israel, también si las personas no son religiosas, es decir, la cosa técnica del veganismo ya está solucionada de antemano en Israel”, explica Daniel Adar, escritor y vegano. “La kashrut no permite comer junto carne y lácteos y los vende y sirve separadamente, de modo que ser vegano aquí resulta fácil”.
Adar también indica que, al ser un país pequeño, los movimientos sociales pegan fuerte, como sucedió hace diez años cuando empezó el movimiento vegano.
La mayoría de los veganos israelíes lo son por motivos ideológicos, y muchos consideran que las dietas centradas en consumo de animales contradicen el mandato judío de preservar la vida, así como el bien estar de los animales, proteger el medioambiente, conservar los recursos naturales, alimentar a los hambrientos y perseguir la paz.
Hoy en día la gente sabe que los productos animales tienen un efecto negativo en la salud, la gente sabe cómo son tratados los animales en industria cárnica y láctea, cómo la agricultura basada en animales amenaza con cambios climáticos y contribuye a la hambruna y la pobreza.
Israel tiene el mayor número de veganos per cápita del mundo y también un ejército que ofrece a sus soldados comidas veganas y ropa y botas veganas también.
Además, después de Estados Unidos, es el país donde hay más startups de sustitutos cárnicos y lácteos, en el gobierno hay un asesor de asuntos animales, liderado por un activista anticrueldad animal, y el presidente, Reuvén Rivlin, es vegetariano.
MIRÁ TAMBIÉN: