Enterrados bajo rocas aparecieron ayer los cuerpos de los tres adolescentes israelíes que fueron secuestrados hace 19 días. Al dolor de sus familiares y seres queridos se suma el temor de toda una región, pues del lado israelí se prometió venganza y desde la facción extremista palestina se amenazó con el infierno.
Mientras los miembros del gabinete de seguridad de Israel discrepan abiertamente sobre cómo responder al secuestro y asesinato de los tres adolescentes que serán enterrados hoy (martes, 1/7/14) en funeral conjunto y estatal, su Fuerza Aérea atacó 34 objetivos de los grupos islamistas Hamas y Yihad en la Franja de Gaza en respuesta al lanzamiento de proyectiles contra el sur israelí.
Por su parte, El movimiento Hamas afirmó que considerará a Israel responsable de cualquier escalada de violencia tras el hallazgo de los cuerpos de tres jóvenes israelíes que, según el Gobierno israelí, habrían sido secuestrados por ese grupo islamista palestino.
El portavoz de Hamas, Sami Abu Zuhri, le dijo a la agencia de noticias AFP que cualquier acción iniciada por Israel “abriría las puertas del infierno“. Además, negó “radicalmente” que Hamás esté involucrado en el presunto secuestro y asesinato.
Los tres jóvenes judíos secuestrados y asesinados el pasado 12 de junio serán enterrados esta tarde (1/7/14) en un multitudinario funeral en la ciudad de Modiín, en el centro de Israel, al que asistirá el primer ministro, Benjamín Netanyahu.
El propio Netanyahu convocó el lunes una sesión especial de su gabinete de seguridad para decidir maniobras militares más contundentes contra Hamas. Antes del encuentro, el primer ministro aseguró que “Hamas pagará” por el secuestro y asesinato de los jóvenes.
Ha trascendido que en la reunión del gabinete hubo discrepancias. Así, los ultranacionalistas criticaron las acciones del Ejército y exigieron una acción más dura. Por el momento, aemás de los bombardeos a objetivos de Hamás en Gaza, el operativo sobre Cisjordania actúa en la búsqueda de los dos sospechosos señados por Israel (Amer Abu Aysha, de 33 años, y Marwan Kawasme, de 29). En la noche del lunes, unidades de combate israelíes registraron las casas de ambos y destruyeron parte de la de Abu Aysha, en busca de pistas que lleven a su detención y esclarezcan si actuaron por iniciativa propia o por orden del grupo Hamás.
La noticia que los familiares de Eyal Yifrah, de 19 años, Gilad Shaar de 16, y Naftali Fraenkel, también de 16 y con pasaporte de Estados Unidos, no deseaban escuchar saltó a las redes sociales en torno a media tarde de ayer y poco después era confirmada por el portavoz de las Fuerzas Armadas, Peter Lernet.