Mientras la batalla por Mosul, el otro gran bastión del grupo terrorista Estado Islámico, continúa en el vecino Irak, las Fuerzas de Siria Democrática (FSD), una alianza armada kurdo-árabe apoyada por EEUU, y rebeldes sirios respaldados por Turquía avanzaron ayer lunes frente al EI en las provincias sirias de Raqa y Alepo, en el norte del país.
Las Unidades de Protección del Pueblo (YPG, en sus siglas en kurdo), el componente más importante de las FSD, anunciaron en su página de Facebook que arrebataron a los radicales el control de la población de Al Abid y de varias granjas de sus alrededores, así como la localidad de Al Laqta.