El Papa reza en el muro de separación entre Israel y Cisjordania

Rompiendo el protocolo, el Papa Francisco pidió parar el coche que le trasladaba hasta la plaza del Pesebre en Belén para bajarse y rezar unos minutos en silencio en una parte del muro que separa Israel de Cisjordania por la parte de Belén.

Con la cabeza apoyada en el muro, los ojos cerrados y la mano tocando la pared, el Santo Padre parecía querer romper el “muro” que separa a palestinos e israelíes de la paz.

Los palestinos utilizan la expresión “muro de la vergüenza” porque les separa del resto del territorio. Para los israelíes se trata de una valla de seguridad que ha supuesto una disminución superior al 90% del terrorismo en territorio israelí.

La construcción de la barrera comenzó en 2002. Consiste en un sistema de vallas y alambradas a lo largo de aproximadamente el 94% de su trazado. El 6% restante es muro de hormigón. El gobierno israelí justificó que esta última parte se erigió con hormigón para evitar ataques desde los edificios del lado palestino contra vehículos que circulan por el lado israelí.

En todo el trazado tiene 84 puertas, 45 de las cuales están abiertas a los trabajadores palestinos que entran a diario a Israel.