Tras el ataque en un club gay en Orlando, EE.UU., donde 49 personas murieron, alrededor del mundo se organizaron vigilias para mostrar su solidaridad con la comunidad LGBT (lesbianas, gay, bisexuales y transgénero).
En 77 países del mundo, sin embargo, todavía existen leyes criminales que castigan, hasta con la muerte, cualquier “conducta homosexual”.
Irán es uno de estos. Allí, cometer un acto homosexual puede conducir a la pena de muerte y ser gay puede ejercer una enorme presión en las relaciones de familia.