Desobediencia a la autoridad: cómo Israel ha creado un coloso científico

Estar al frente de uno de los centros punteros a nivel mundial en investigación científica no es sencillo. Y menos si se trata de una institución israelí. Sabes que de un momento a otro saltará la pregunta incómoda, el trasfondo político, la confrontación. Te pedirán tu opinión sobre el Estado de Israel o sobre el conflicto Palestino y eso, para un científico, es un equilibrio complejo. Daniel Zajfman, físico israelí de 57 años y presidente del Instituto Weizmann, que compite en las ligas de Stanford o el MIT, no se arruga cuando llega ese instante. Picotea como si nada los trozos de piña de su desayuno y responde sin titubear al preguntarle por el boicot científico a su país, parte de la campaña BDS en marcha desde hace más de una década. “Es puro antisemitismo”.

Leer más…